Esta es la frase que muchas veces escuchamos en la consulta.
Muchos pacientes vienen y algunos nos lo dicen y otros tan sólo lo piensan, pero es una realidad. Todos queremos nuestros dientes más blancos.
Los dientes se van oscureciendo con el paso de los años, debido a tinciones externas, que provenienen de las bebidas y comidas que ingerimos. Además, también hay medicamentos o tratamientos que pueden ocasionar tinciones más severas.
Dependiendo de la causa, y del grado de tinción tenemos a nuestra disposición diversos tratamientos.
1- El blanqueamiento dental: es el tratamiento de elección para casos de tinciones de leves a moderadas y siempre de origen externo. Es un tratamiento muy sencillo, cómodo para el paciente y muy económico. Más información AQUI
2- El blanqueamiento dental interno: es un tratamiento un poco más fuerte que el anterior y sus resultados no son predecibles al 100%. Pero si que en muchos casos funciona y logra aclarar un diente desvitalizado.
3- Las carillas de composite o de porcelana: son un recubrimiento que colocamos pegado sobre el diente para modificar el color y si es necesario también la forma. No hay que rebajar el diente y se puede hacer incluso sin anestesia. Más información AQUI
4- La ortodoncia, el poner los dientes en su sitio nos permite ver bien todos los frentes anteriores de los dientes, que en ocasiones, debido a que se encuentran en una posición más posterior que los demás, parece que estén más oscuros. Una correcta posición de los dientes nos ayuda a tener mejor higiene y que transmitan mejor la luz. Más información AQUI
5- La limpieza bucal, que normalmente hacemos anualmente a todos nuestros pacientes, ayuda a eliminar pequeñas manchas o tinciones derivadas de los hábitos alimentarios.
Tenemos la solucion para cada caso, te aconsejaremos la mejor solución a tu medida.
Muchas gracias y hasta pronto!
